Catalina Rothberg / 2 Min / Impacto Social
La huella personal es, muchas veces, tan simple que cuesta identificarla. El legado de una persona generalmente se juega en los detalles del día a día.

Hay veces que pensamos que es cuestión de encontrar algo grande, visible y memorable ante la sociedad y no reconocemos que lo que de verdad perdura y marca, es un simple gesto como una mirada que dignifica, una abrazo que acompaña o una sonrisa que da esperanza.
Recibí historias que inspiran
La pandemia llevó a los chicos de Festejo Solidario a adaptarse a la circunstancia sin perder esa manera tan cercana y alegre de celebrar la vida de tantos niños en situación de vulnerabilidad. Esta vez pudieron festejar los cumpleaños de mitad de año y lo hicieron con una gran invitada. Sofi Jujuy fue junto con sus amigas a llevar alegría y sonrisas a un festejo inolvidable.

Las cajas mágicas cumpleañeras y un rato de diversión en la juegoteca son dos herramientas claves para traer felicidad instantánea a cualquier lugar.
Por eso volvemos siempre a los gestos y detalles. No es fácil pero si es simple. No es fácil porque requiere de mucho trabajo previo, de esfuerzo y tiempo invertido de cada equipo para organizar y gestionar cada festejo.
Pero es simple porque lo que necesitamos es que nos miren, que nos quieran y sabernos importantes. Reconocer que es bueno que estemos en el mundo. Y eso hace Festejo Solidario. Vuelve a lo simple, a lo que de verdad nos llena. A un festejo de cumpleaños, que para muchos puede ser algo común y lógico y para otros es un día que nunca van a olvidar. Ese día en el que fueron el centro, que hubo risas, canciones y juegos .