Agustín Díaz / 2 Min / Impacto Social
Familia, amor y trabajo en equipo: la historia del jardín de infantes que promueve la integración del niño en la educación inicial para que todos logren una enseñanza de calidad e integradora.
Manuelita es un jardín de infantes que surgió de una iniciativa de la Fundación María Cristina Malbrán como un proyecto educativo para los niños de comunidades vulnerables de Pacheco. Abarca el nivel inicial completo en ambos turnos y las familias deben, solamente, abonar una cuota mínima por mes.
La misión del jardín es igualar las oportunidades en la educación del nivel inicial. Para lograr dicho objetivo crearon un espacio educativo, donde los chicos despliegan sus capacidades y potencialidades. Su trabajo está basado en la empatía, transparencia, el respeto y la integración del niño en la comunidad.
Recibí historias que inspiran
En Manuelita la relación con las familias siempre fue positiva y apostaron, entre todos, a la mejora de los niños. “Si bien la comunidad está plagada de necesidades, en Manuelita siempre se trató de brindar todo lo que se puede y más “, explica Marisa, maestra del jardín.
Tanto los niños, padres como las maestras sienten a este lugar como un segundo hogar, una segunda familia. Cuando los niños ingresan al jardín, la alegría, tanto de ellos como de sus maestras, se multiplica. “En Manuelita se tiene de todo, pero lo importante es que cuando se abren las puertas, para que entren los chicos, somos un equipo”, cuenta Débora, también maestra del jardín. Los valores de la amistad, familia y trabajo en equipo son notorios y se hacen sentir a la hora de visitar y hablar de Manuelita.
Antes de que comience el contexto actual de encierro, al jardín asistían 180 niños repartidos en dos turnos. Su equipo está integrado por nueve personas, en el que Karina Rosales es la directora del centro educativo. Entre todos, incluyendo las familias de los alumnos, buscan promover la salud, el respeto y la integración del niño.
En Huellas contamos su historia porque creemos que organizaciones, como Manuelita, deben ser reconocidas y promocionadas en nuestra comunidad. Su trabajo está basado en el cariño e importancia de la familia y en el trabajo en equipo del jardín y las familias del niño.
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